Juegos eróticos

Una pareja esta entregada a los mil y un juegos amorosos, cuando yendo por el sesenta y nueve llaman a la puerta insistentemente. Se levanta el tio con muy mala hostia y abre. Es el cartero. Le entrega un paquete postal y se queda mirando al pavo.
– QUE COJONES MIRAS?
– Se ha fijado que tiene sangre en la boca?
El tio se toca los labios, se mira la mano y contesta:
– Ah! no es nada, un golpe que acabo de darme.
– Si, ya veo… contra el vide, verdad? Como tiene la frente llena mierda…

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *