Estaban Romeo y Julieta en una noche muy romántica, con luna y en un lugar muy alejado y privado y mantenían la siguiente conversación:
Julieta: Romeo ¿no quisieras que coja tu miembro con mis manos y lo acaricie a él y a tus bolitas, para que sientas placeres enormes?
Romeo: ¡Como se te ocurre, amada mía! ,¿Cómo vas a usar esas manos tan puras para algo así? No, no, de
ninguna manera.
Julieta: Romeo, amor mío, ¿no quisieras que coja ese miembro tan varonil, y lo ponga entre mis piernas o entre mis senos, y te haga llegar a niveles de placer jamás alcanzados por humano alguno?
Romeo: ¡Jamás!, nunca permitiría que esas partes tan tuyas, tan blancas y sin mancha, puedan ser tocadas por esa parte tan sucia de mi cuerpo. No, dueña mía, ¡jamás!
Julieta: ¡Ay, amado mío!, ¿No quisieras entonces introducir ese gran pedazo de carne tuya, dentro de mi boca y que con esto, logre estremecer tu cuerpo y alma con tiernas y locas caricias?
Romeo: ¡Nunca jamás!, no puedo pensarlo siquiera, que mi miembro varonil toque esa boca tuya que solo
dice cosas hermosas y canta a viva voz tu amor por mi.
Julieta: Bueno Romeo, entonces vamos a tener que pensar en otra cosa, porque a mí, ya me está doliendo
mucho el CULO!

Comentarios (3)
Qué chispa tiene este chiste, me partí de risa. Me ha cambiado el ánimo para bien, gracias. Me ha cambiado el ánimo para bien, gracias. Prometo contarlo en casa, nos encanta reír juntos.
Vaya ocurrencia más buena, me ha sacado una sonrisa enorme. Me quedo con la ocurrencia final, es genial. El juego de palabras está finísimo, me ha sorprendido. Qué arte, ojalá subáis más chistes así.
Qué bien contado está, me ha animado el día. Lo voy a compartir con mis amigos para que se rían también. Deberían hacer una serie solo con chistes como este. Prometo contarlo en casa, nos encanta reír juntos.