El primer día se lleva al pato y le dice:
-Mira, esa es la torre Eiffel.
-Cua!
-¿Cual va a ser?, esa de ahí enfrente, ¿es que no la ves?
-Cua!
-Y ese es el arco del triunfo.
-Cua!
-¿Pero es que no lo ves?
Bueno y así con todo, el tío harto se vuelve al hotel y le dice al pato:
-Vaya día que me has dado, pato! pues como castigo mañana te quedas aquí y me llevo al cerdo.
Y dice el cerdo:
-Oink!
-Hoy no! he dicho que mañana!.
Valora este chiste !!!
[Total: 0]

Comentarios (3)
¡Qué puntazo de chiste! Así da gusto, humor sano y con mucha gracia. No puedo dejar de sonreír, qué bueno. Prometo contarlo en casa, nos encanta reír juntos. Necesitaba una risa así, gracias por publicarlo.
¡Qué puntazo de chiste! Lo voy a compartir con mis amigos para que se rían también. Seguid publicando más, que alegran un montón. Lo apuntaré para contarlo en la próxima comida familiar.
De lujo este chiste, muy simpático y fresco. Muy ingenioso y bien escrito, ¡enhorabuena! Me quedo con la ocurrencia final, es genial. Entretenidísimo, me hizo desconectar un rato.