Chistes de profesiones

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Adiestramiento de arañas

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En una famosa serie de experimentos, el doctor Bacterio amaestro a una araña para que reconociese su voz y se dirigiese hacia el. Primero puso la araña a un lado de una mesa y la llamo diciendo “araña, ven aqui” y la araña cruzo la mesa.
Tras cortarle una pata, el profesor volvio a colocar la araña al otro extremo de la mesa y volvio a llamarla; la araña volvio a cruzar la mesa, cojeando.
En sucesivas etapas, el profesor le va cortando más y más patas, y la araña siempre cruza la mesa dirigiendose hacia el cuando la llama, cada vez con más dificultad y necesitando más tiempo.
Finalmente, el doctor Bacterio le corta las ocho patas, la pone en el extremo más alejado de la mesa y la llama. La araña no viene. Bacterio empieza a gritar con más fuerza, insistiendo durante un rato, pero la araña no hace nada.
La conclusion que saco el profesor Bacterio de este experimento es que las arañas tienen las orejas en las patas.

Removedor de tampones

admin

Un tipo que viajaba en avión estaba en necesidad urgente de usar el baño.
A cada intento de utilizarlo, lo encontraba ocupado.
La sobrecargo, consciente de su necesidad le sugirió que utilizara el baño de damas, pero le advirtió que se abstuviera de apretar los botones.
Eran 4 botones marcados con las letras AT, AC, TA y RAT.
Cometiendo el fatal error de muchos hombres de desatender lo que una mujer les dice, decidió probar los botones para satisfacer su enorme curiosidad.
Cuidadosamente apretó el primer botón marcado con AT e inmediatamente un chorro de AGUA TIBIA roció su parte baja y pensó:
– “Caramba, qué bien la pasan las mujeres”.
Curioso, apretó el segundo botón marcado con AC e inmediatamente una corriente de AIRE CALIENTE secó suavemente su parte baja y pensó:
– “Caramba, todo esto parece de otro mundo”.
Su curiosidad lo llevó a apretar el tercer botón con TA e inmediatamente un TALQUEADOR AUTOMÁTICO empolvó su parte baja con un oloroso y suave talco.
La estaba pasando tan bien que naturalmente apretó el cuarto botón marcado con RAT.
Cuando despertó en el hospital, muy asustado llamó a la enfermera y le preguntó:
– “¿qué es lo que pasó?, lo último que recuerdo es que estaba en el baño de damas de un avión.”
– La enfermera contestó:
– “Claro, usted la estaba pasando tan bien, hasta que apretó el botón RAT para activar el REMOVEDOR AUTOMÁTICO DE TAMPONES (TAMPAX)… pero no se preocupe, su pene está debajo de la almohada.”