Chistes verdes

Chistes verdes, cochinos, subidos de tono, chistes picantes

Desesperación

Esto es un camellero que va por el desierto y esta completamente
desesperado porque hace dos años que no ha tocado mujer, asi que decide tirarse a su camella. Se baja, se acerca por detras, y cuando va a empezar la camella da unos pasos para adelante. Frustado, el hombre vuelve a intentarlo más rapido, pero la camella tambien se aparta más rapidamente.Intenta sujetarla por las bridas, pero son demasiado cortas y no llega; va probando varias ideas, pero ninguna le funciona.
En esto que se le aparecesu hada madrina; es una jovencita rubia, con unos ojos preciosos, esta buenisima, y le dice sugerentemente:
– Hola, soy tu hada madrina. Pideme cualquier deseo y te lo concedere.
– Cualquier deseo ?
El hada le dice coquetamente :
– Si, cualquier cosa que quieras.
– De verdad que me vas a conceder cualquier deseo ?
El hada le guiña un ojo y le dice suavemente :
– Que si, tonto, lo que quieras.
El camellero se lo piensa un poco, se pone colorado y le dice :
– Entonces… te importaria sujetarme a la camella un momentito ?

Desgracia en el pene

Esto era una pareja que iba con el coche por la autopista cuando en el arcén se encuentran a un hombre con las manos en la entrepierna gimiendo de dolor en el suelo. El hombre del coche, al ver al otro dice:
-¡Para el coche, María, que ese es Alberto!
Aparcan a un lado, se bajan y van a dar con él y le preguntan:
-¿Qué te pasó, Alberto, estás bien?
-… Aahhh, ahhh tuve un accidente con el coche… aaahh, ahhh…
A lo lejos ven un ferrari alemán echo un total siniestro irrecuperable. El hombre le dice:
-Tranquilo, Alberto, tranquilo, tu eres rico, puedes comprarte todos los ferraris que tu quieras y más…
-No, no es eso, mira en el asiento de al lado…
Se asoman y ven a una rubia que en vida podría haber sido espectacular pero que estaba muerta y totalmente irreconocible en el asiento del copiloto.El hombre le dice:
-Tranquilo, Alberto, tranquilo, tu eres rico, tu puedes pagarte todas las putas ricas que tu quieras y más
-No, no es eso, mira en la boca de la rubia…