Chistes verdes

Chistes verdes, cochinos, subidos de tono, chistes picantes

Sin sentimiento

Un tio y una tia se conocen en una bar una noche cualquiera. Van al piso de ella y echan un polvo.
Al cabo de un tiempo, cuando el se recupera y se dispone a marcharse, ella dice:
– Tu seguro que te dedicas a la medicina.
– ¿Y tu como lo sabes? No nos conocemos de nada, ¿no?
– Es más, seguro que eres anestesista.
– ¡Justo! ¿Pero como lo sabes?
– Porque no he sentido nada, nada.

¡Sorpresa!

El padre, enfurecido, le pega una bronca descomunal a su hijo adolescente por llegar a casa ya entrada la madrugada.
– Es que verás, papá, he tenido mi primera experiencia sexual.
– ¡Ah, hombre! Esto lo cambia todo. Venga, siéntate y cuéntale a tu padre con confianza cómo ha ido…
– ¡Sí! ¡El culo tengo yo para sentarme ahora!