Chiste Jaimito el encubridor

El marido llega a casa sin avisar, y la esposa tiene que esconder a su amante, asi que lo mete en el armario. Una vez alli, el hombre se queda de piedra cuando oye una voz a su lado que le dice:
– Esta oscuro esto, eh?
Y entonces se da cuenta de que es Jaimito, que estaba escondido en el armario mirando mientras lo hacía con su madre.
– Callate, Jaimito…
– Creo que voy a estornudar.
– No, por favor…
– ¿Me daras un poco de dinero?
– Si, toma cien pesos, pero cállate – Nota: el amante no tiene puestos los pantalones, pero se ha metido en el armario con ellos.
– Oye, de verdad que tengo unas ganas enormes de estornudar.
– Uy que niño, anda toma la cartera…
– Vale, ya se me han pasado las ganas.
Total, que Jaimito se compra una bicicleta esa misma tarde. Su madre se molesta, claro, pero como el niño no suelta prenda, le manda a que vaya a confesarse. Obviamente, Jaimito no esta demasiado acostumbrado a los confesionarios, asi que cuando le llega su turno, lo primero que hace es decir:
– Esta oscuro esto, eh?
– Jaimito, no empieces otra vez.

Valora este chiste !!!
[Total: 0]

Comentarios (3)

Qué bien contado está, me ha animado el día. Muy ingenioso y bien escrito, ¡enhorabuena! No puedo dejar de sonreír, qué bueno. ¡Más de estos, por favor! Me alegran el día.

Vaya ocurrencia más buena, me ha sacado una sonrisa enorme. No puedo dejar de sonreír, qué bueno. El juego de palabras está finísimo, me ha sorprendido. Prometo contarlo en casa, nos encanta reír juntos.

Tremendo humor, justo lo que necesitaba ahora. El juego de palabras está finísimo, me ha sorprendido. Muy ingenioso y bien escrito, ¡enhorabuena! Lo guardo para contarlo en la próxima reunión, verás qué risas.

Dejar un comentario

Compártelo con quien quieras