Viajaba en tren una joven madre con su hijo recien nacido, y enfrente, un señor, parecia que iba a su aire, pero cuando el niño quiso mamar, la madre sacó una preciosa teta y se la ofrecio al niño, este sin encontrar el pezón se puso a lloriquear.
Entonces dice el señor.¡¡ Pichurrin comete la comidita, sino me la como yo ¡¡
Valora este chiste !!!
[Total: 0]

Comentarios (3)
Tremendo humor, justo lo que necesitaba ahora. Muy ingenioso y bien escrito, ¡enhorabuena! No puedo dejar de sonreír, qué bueno. Prometo contarlo en casa, nos encanta reír juntos.
Me he reído muchísimo con este chiste, de verdad. Seguid publicando más, que alegran un montón. No puedo dejar de sonreír, qué bueno. ¡Más de estos, por favor! Me alegran el día.
Me ha encantado el giro final, súper ingenioso. Deberían hacer una serie solo con chistes como este. Me ha cambiado el ánimo para bien, gracias. Entretenidísimo, me hizo desconectar un rato.