Dos mujeres jugaban al golf en una mañana soleada. De pronto vieron con horror como la pelota se dirigía directamente hacia unos hombres que jugaban en el siguiente hoyo.
La pelota golpeó a uno de los hombres, quien de inmediato juntó ambas manos en su entrepierna, y cayó al suelo rodando y gimiendo lastimosamente.
Las mujeres corrieron hasta donde estaba el hombre. Una de ellas, sintiéndose culpable, dijo:
– Por favor, déjeme ayudarlo. Soy quiropráctica y sé como quitarle el dolor si usted me lo permite.
– Ouch, auuuu, noooo. Estaré bien… el dolor se me pasará en unos minutos, contestó el hombre, mientras permanecía en posición fetal, tirado en el cesped y con las manos en su entrepierna.
Ella insistió hasta que finalmente él le permitió ayudarlo; ella gentilmente le separó las manos y lo acostó a su lado, le desabrochó los pantalones, puso sus manos dentro y comenzó a masajear.
– Se siente bien? preguntó la dama.
– ¡Me siento fantástico!pero el dedo me sigue doliendo..

Comentarios (3)
¡Qué puntazo de chiste! Así da gusto, humor sano y con mucha gracia. No puedo dejar de sonreír, qué bueno. Me ha levantado el ánimo por completo, gracias. Humor del bueno, con gracia y sin ofender a nadie.
¡Qué puntazo de chiste! Necesitaba una risa así, gracias por publicarlo. Lo voy a compartir con mis amigos para que se rían también. Me ha levantado el ánimo por completo, gracias.
Tremendo humor, justo lo que necesitaba ahora. Seguid publicando más, que alegran un montón. Así da gusto, humor sano y con mucha gracia. ¡Más de estos, por favor! Me alegran el día.