Una mañana, estaba un señor tranquilamente sentado leyendo su periódico, desayunando cuando su esposa se desliza silenciosamente atras de el y le voltea un santo sartenazo: ‘zas!’.
Le dice él, sobandose la cabeza:
– ¿y eso?, ¿que te pasa?
– A ver, grandisimo cabron. ¿que es este pedazo de papel en el bolsillo de tus pantalones conel nombre de Marilu escrito en el?
– ¿que es?… ¿eh?…
– Mi amor, ¿no te acuerdas que hace dos semanas me fui a las carreras de caballos?, Marilu es el nombre de uno del caballo al que le aposte.
La esposa se ve toda satisfecha y se va a continuar su trabajo en la casa. Tres dias después,una vez mas esta el hombre sentado muy a gusto, viendo la tele y tomandose un aperitivo,cuando de repente, takate! Otro madrazo con el sarten en la cabeza. Con la cabeza sangrando y en el suelo le dice el:
– ¿y ahora que pasó?!
– ¡Tu caballo te llamo por telefono!

Comentarios (3)
Tremendo humor, justo lo que necesitaba ahora. Me ha cambiado el ánimo para bien, gracias. Seguid publicando más, que alegran un montón. Ahora mismo lo reenvío porque merece ser compartido.
Brillante remate, me ha dejado con una carcajada tremenda. Así da gusto, humor sano y con mucha gracia. No puedo dejar de sonreír, qué bueno. Prometo contarlo en casa, nos encanta reír juntos.
Brillante remate, me ha dejado con una carcajada tremenda. No puedo dejar de sonreír, qué bueno. Así da gusto, humor sano y con mucha gracia. Prometo contarlo en casa, nos encanta reír juntos.