Un ciego entra en un centro comercial con su perro lazarillo. En ésto que coge al perro por el rabo y le empieza a dar vueltas como si de un lazo de cow-boy se tratara.
– Pero,…¡qué está haciendo hombre!,- dijo el segurata del centro
– Tranquilo, no se preocupe,- respondió el ciego, y añadió,- sólo estoy echando un vistazo.
Valora este chiste !!!
[Total: 0]

Comentarios (3)
Vaya ocurrencia más buena, me ha sacado una sonrisa enorme. Lo voy a compartir con mis amigos para que se rían también. Me ha cambiado el ánimo para bien, gracias. Me ha levantado el ánimo por completo, gracias.
De lujo este chiste, muy simpático y fresco. El juego de palabras está finísimo, me ha sorprendido. Seguid publicando más, que alegran un montón. ¡Más de estos, por favor! Me alegran el día.
Me ha encantado el giro final, súper ingenioso. No puedo dejar de sonreír, qué bueno. Muy ingenioso y bien escrito, ¡enhorabuena! Ahora mismo lo reenvío porque merece ser compartido.