Dos borrachos beben en el mostrador de un bar, cuando entra una persona desesperada y gritando: ¡Julian, corre que a tú mujer la acaban de ingresar en el hospital!
Uno de los dos borrachos sale del bar como un bólido, en la calle toma una bicicleta que habia aparcada y al tratar de montarse se cae y se da un golpe en la cabeza con el borde de la acera. Una vez recuperado, el otro le interroga:
Pero, ¿qué te ha pasado, hombre?
No se, tio, yo ni me llamo Julian, ni tengo mujer, ni se montar en bicicleta.