Un señor y una señora salen una noche. El señor conviene con ella que le va a pagar 500 euros por sus caricias.
Cuando salen, él se da cuenta de que no lleva dinero en efectivo y decide que le enviará un cheque a través de su secretaria y, para que ésta no se entere de las relaciones que hubo entre los dos, le dará a entender que el dinero es en pago por el alquiler de un apartamento.
Pero el señor decide enviarle un cheque por 250 euros en lugar de los 500 euros acordados y le expone las siguientes razones:
“Estimada señora: Ahí le envio 250 euros en vez de los 500 acordados en pago del apartamento que alquilé, pues esperaba otra cosa :
– Esperaba un apartamento sin estrenar.
– Que tuviera calefacción.
– Que fuera pequeño.
Resultó ser todo lo contrario, pues estaba usado, era frío y ancho. Atentamente,…”
Al recibir esto, la joven señora le contesta:
“Estimado Caballero: Le devuelvo su dinero, pues en verdad no lo necesito, pero debo decirle con referencia a lo que dice su carta, que usted tenía que saber:
– Que un apartamento tan bonito no podía estar sin estrenar.
– Que con seguridad usted no supo encender la calefacción.
– Que yo no tengo la culpa de que usted no tenga suficientes muebles para llenar el apartamento. Atentamente,…”
Comentarios (3)
Qué chispa tiene este chiste, me partí de risa. Me quedo con la ocurrencia final, es genial. No puedo dejar de sonreír, qué bueno. Entretenidísimo, me hizo desconectar un rato.
Qué chispa tiene este chiste, me partí de risa. Lo voy a compartir con mis amigos para que se rían también. Seguid publicando más, que alegran un montón. Me he quedado con una sonrisa tonta, ¡genial!
¡Qué puntazo de chiste! Me quedo con la ocurrencia final, es genial. El juego de palabras está finísimo, me ha sorprendido. Lo guardo para contarlo en la próxima reunión, verás qué risas.