Va un marinero (todo chulo él) paseando por un Paseo, con la camisa abierta y un barco tatuado en su pecho en pelo.
Cuando se acerca paseando un travesti. Este cuando lo ve se aproxima , le acaricia el pecho y exclama:
-¡Ahh¡¡ Un barcoooo¡¡¡
El marinero, sin pensarlo le pega un puñetazo.
Y el travesti le dice:
– Y ES DE GUERRAAA¡¡¡¡¡