En un restaurante de un puerto marino, llega un hombre y pide:
– Camarero, quisiera un plato de ostras, que sean frescas, que estén bien limpias, que no estén muy frías, las quiero condimentadas, pero no mucho, que….
El camarero interrumpe y pregunta:
– Perdone señor…., ¿las quiere usted con perla o sin…?