Un Turista que llega a orillas del río Jordán, y pregunta: Cuantos dólares me cuesta cruzar el río
– El botero le dice:
– Cincuenta dolares señor.
– Me parece un poco caro, dice el turista.
Contesta el botero, Comprendaaa…, que aquí camino Jesús sobre las aguas.
Y el turista contesta: No me sorprende con los precios que cobran.