Entre amigas:
– ¡Estás pálida!
– Es que vengo del médico y me ha dicho que me quedan dos meses de vida.
– Mujer, si quieres te dejo a mi marido.
– ¿Y para qué quiero yo a tu marido?
– Porque te puedo asegurar que con mi marido esos dos meses te parecerán una auténtica eternidad.