Estan dos amigos charlando y le dice uno al otro;
-Ir en el metro con un amigo mío es lo mejor, porque como tiene un ojo de cristal, cuando está el vagon abarrotado, se saca el ojo, lo levanta por encima de las cabezas de la gente y en seguida me dice “el tercer asiento de la última fila está libre” y siempre encontramos sitio.-
-Oye, pues si que es práctico. Pues yo tengo un primo que le sale leche del meñique y cuando vamos al bar, siempre pide un cafe sólo, y le echa la leche directamente del dedo.
-Eso habría que verlo.
-Sí, con el ojo de tu colega.