Error grave

Llaman al timbre de una pensión. Una señora abre la puerta y se encuentra delante a una chica joven y bastante guapa.

Buenos días, señora. Busco a Marcelo, soy su hermana.

Encantada de conocerla… ¡Pero yo soy su madre…!

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *