Pasar por una mala racha

Una jovencita está de parto en Maternidad y la matrona le pregunta si le gustaría que su marido estuviera presente durante el nacimiento.
– Me temo que no estoy casada – responde la joven.
– ¿Tiene novio? – pregunta la matrona.
– No.
– ¿Compañero quizás?
– Tampoco, no tengo a nadie. Tendré al niño yo sola.
Después del parto, la matrona vuelve a hablarle:
– Ha tenido una niña preciosa, pero antes de que la vea, le tengo que avisar que le ha salido negra.
– Bueno – responde la joven – verá, es que estaba pasando por una mala racha, sin dinero ni sitio en qué vivir, así que acepté un trabajo en una película porno, y el protagonista era negro.
– Oh, lo siento, aunque eso no es asunto mío – responde la matrona – el caso es que, además, la niña tiene el pelo rubio.
– Eso es que también había un sueco en la película, sabe, y necesitaba el dinero urgentemente – responde la joven.
– Oh, lo siento, aunque eso no es asunto mío – vuelve a responder la matrona – el caso es que, además, la niña tiene los ojos rasgados.
– Eso es que también había un hombrecillo chino en la película, y de verdad que eran malos tiempos, así que no tuve elección – dice la joven.
La matrona trae por fin a la niña y le da unas palmaditas en el culete. La niña empieza a llora y la madre exclama:
– ¡Gracias a Dios!
– ¿Por qué? – pregunta la matrona extrañada.
– Bueno – responde la joven madre aliviada – por un momento tuve el horrible presentimiento de que iba a empezar a ladrar.

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *