Penitencia

En la víspera de su boda, un joven va a confesar. Terminada la confesión, a punto de marcharse recuerda que no le han señalado la penitencia.
– Reverendo, dice, no me ha puesto penitencia.
– No importa hijo mío, no importa, responde el párroco. De todos modos vas a casarte mañana…

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *